Urbanismo Protesta

  • http://bicicritica.ourproject.org/web/
  • http://quierescallarte.ourproject.org/

martes, 11 de diciembre de 2012

Madurez.

Y cuándo maduramos? Tristemente, maduramos cuando al ir al trabajo en vez de escuchar la vocecita infantil que dice: Yupiii, a trabajar, me encanta lo que hago! se oye una voz un poco anodina diciendo...bueno, está bien, al menos puedo pagar la renta y permitirme vivir aquí. No es tristeza. Es peor, es realismo. Sucedió...hace una semana: Me volví conformista. Empecé a aceptar que lo que no se puede cambiar no se puede cambiar. Como las ratios de mi escuela. Y eso significa que no pienso en ello siquiera. Cuando me quiero enfadar solo encuentro una voz conformista diciéndome: Bah, sólo quedan dos días para el fin de semana. Doctor...¿estaré enfermándome? ¿estaré madurando?

jueves, 13 de septiembre de 2012

What is love? Love is that warm feeling that keeps me alive, whatever the weather or the situation. Love is what keeps me smiling everyday, even if i am not at my best. Love is you, and me, trying to understand each other, despite we will never know all of each other. And if one day i heard you saying: "ces,t finnie, mon amour", love will be the way to put myself together again. Serre moi, mon coeur!

jueves, 6 de septiembre de 2012

Placeres mundanos

Debería estar buscando un trabajo activamente. Pero en vez de eso, ayer me fui a nadar al mar, a un sitio llamado "forty foot" en Dun Laoghaire, porque literalmente la profundidad es de 40 foot (todavía no sé cuantos metros es eso, pero es profundidad). Descubrí dos cosas sorprendentes: - Estaba demasiado implicada en mi propia búsqueda de trabajo - Estaba olvidando mi propia felicidad, mi propio disfrute de vivir en Dublín. (o el disfrute de meter el cuerpo en agua congelada, y sentir cómo todos los huesos se enfrían hasta el punto de que cuando sales tienes calor por el contraste de temperaturas. Mi compañera de piso vino conmigo, pero ella hace trampa porque tiene traje de neopreno (vergüenza debería de darle...es irlandesa!) Sí, también se puede hacer sin traje de neopreno, con biquini :)- en pleno verano- y con 19 grados. Siempre que no haya viento. La vida es así, todo es acostumbrarse. Y a la tarde, fui a ver a mi querido froggy (my novio es francés, les llaman froggies en inglés porque comen ancas de rana en Francia...estúpido apelativo que utilizo para no utilizar su nombre y pincharle un poco) y se quedó medio sopa en mi regazo. Me encanta la vulnerabilidad masculina, me parece tan tierna... Parecía un niño...me entraron sentimientos extraños. Pasé la barrera de la atracción psicológica- digamos el típico, me gusta y provoca reacciones interesantes en mi cuerpo- a un grado más allá, cuándo los sentimientos se disparan y te encuentras pensando en chorradas como ¿niños? ¿será un buen padre? etc... Que miedo dan esas cosas. Pero por fin aprendí a aceptarlas como algo natural. A aceptar que es correcto sentir esas cosas, no pasa nada. También me preocupa cuando se preocupa y siento ganas de ayudarle a sentirse mejor. (filantropía?) Lo más curioso, es que con lo que me cuesta estar en silencio, fui capaz de estar quieta, respetando el silencio. El silencio, ese elemento tan relevante en las relaciones humanas. Si no hay silencio, un silencio apropiado, no se puede conectar con las personas, porque todo se convierte en actuar por actuar, sin escuchar, sin recibir información de lo que sucede. No sé por qué antes no fui capaz de estar en silencio con otras personas, siempre había una necesidad de rellenarlo con palabras. Pero él, habla mucho, pero también para decir lo necesario. Me encanta. Me voy a ver si empiezo a organizarme, en vez de tirar el tiempo por la ventana. Llevababa meses sin tener tiempo...y ahora, me sobra. En fin, feliz día

martes, 7 de agosto de 2012

Septiembre

September... El mes de las preocupaciones. Una de las tradiciones más repetidas en mi vida de estudiante era el sentimiento de Septiembre. Recomenzar. Creí haberme librado de ello, pero obviamente no. Mi empresa cambia de dueño. Y echan a la calle a gente (a mí concretamente, entre otros posiblemente...). Empieza el peloteo, la gente se pone nerviosa, el clima laboral cambia. También creí estar a salvo de la inseguridad laboral, pero ¿quién lo está? Muy pocos. De todos modos...recapitulemos: Perdí un trabajo, en febrero, encontré otro. Me movieron a otra escuela. De trabajo en trabajo y tiro porque me toca... No es para quejarse, no. Al menos hay trabajo al que aferrarse. Aferrarse, si. Quien pudiera vivir sin tener que aferrarse a algo. En este caso, a un trabajo. Quien pudiera vivir sin tener que depender del dinero. Otro gallo cantaría. Ahora, no me quejo de la situación laboral. Me quejo de haber encontrado el amor, o algo que parece ser amor. De tener pareja justo ahora. En otro país, con alguien que ni siquiera es de Irlanda. Porque... Anula todo sentimiento de seguridad. Si cualquiera de los dos se cansa, se va a su país. ¿y quién se va a mover? Probablemente antes me vaya yo a Francia que él a España con la que está cayendo. Escuchadme...si viajáis, NUNCA os enamoréis. Porque, es el fin de la seguridad. Todo lo que supones que sería de un modo, nunca será como imaginaste, será simplemente de otro modo. Aleluya. Por locura que parezca, mi vida ya no tiene ni pies ni cabeza, o ya no suena como la inventé a mis 24 años: con un español, trabajando en un colegio público, hablando mi propio idioma. Desde que puse un pié fuera de Madrid, todos esos sueños ya no son lo que eran. Son una sombra de lo que eran. Ahora, lo que he encontrado es mucho más valioso que todas esas expectativas de libro, aunque cuesta el doble. Y si dura, ha durado. Si no dura, bueno, pasamos página y a reinventar la vida. ¿Para qué complicarse? Al final es simple: es ir dando con lo que quieres, reinventando el libro de tu vida. En el mío, me gustaría que dijera: Y fueron felices y comieron lechugas (soy vegetariana)." Y tuvieron niños multicolores, o multilingues (que hablaban 3 lenguas: inglés, francés y español) y se quisieron mucho mucho, tanto que es aburrido hablar de ello. No quiero dar envidia, la verdad es que sería mucho más fácil si todo estuviera en el mismo país: familia, amor, trabajo... Mi vida por ser simple.

miércoles, 13 de junio de 2012

Me ha dicho internet que España ha sido rescatada económicamente. Qué bien, ya esta igual que Irlanda. Jodida y controlada por el banco internacional. Hurray! Ya no tendré que soportar los comentarios de mis amigos españoles sobre Irlanda: Bah, tan bien no estarán, si han tenido rescate económico! Como si no fuera lo mismo para todos!!!! Me pone negra la maldita manía de los españolitos de separarse del resto de Europa mentalmente. Nos guste o no, estamos en el mismo barco. (Y nos guste o no, el barquito de cascara de nuez hace aguas. Qué bien, a nadar todos como lindos pececitos.) Sonrisa de oreja a oreja, al menos tenemos todavía casa (e hipotecas) y sueños. Los sueños son lo que cuenta ahora mismo.

jueves, 24 de mayo de 2012

Galimatías pedagógico

Querer cambiar el hecho de que un grupo de niños hagan las cosas porque reciben dulces como premio SIEMPRE, diciéndoles que el premio es que en cuanto hagan algo bueno recibirán reconocimiento de sus mamás o papás, conseguir que recojan los juguetes REQUETEBIEN ( Eureka! lo logré, van a dejar de intercambiar dulces por acciones buenas...Sí)... Y tristemente descubrir que cuando las mamás van a recogerlos, y se lo comentas "eh, tu hija ha estado ayudando, se ha portado muy bien". La respuesta es: Qué bien, cielo, te voy a comprar un huevo kinder de chocolate. ¿Es eso reconocimiento social remarcado por un dulce? ¿o es volver a lo mismo: intercambiar dulces por acciones? Probablemente no...simplemente son dos premios en uno, el reconocimiento y el objeto material (el dulce). No sé, de cualquier modo me parece que es como estar adiestrando focas: un pescadito cada vez que hacen algo bueno. País de locos. (como si el mío no lo fuera...menuda escusa. Pensamientos en voz alta que no puedo expresar porque me mirarían raro.)
Uno de los inconvenientes de vivir en otro país, es simplemente el hecho de vivir en otro país. A partir de cierto tiempo se convierte en normal y empieza a picarte cierto criticismo que no tenías antes, cuando estabas simplemente "aprendiendo inglés" o merodeando y conociendo maravillosos parajes. Lo más triste es el hecho de mirar por la mirilla de los medios de comunicación España, y ver en lo que se está convirtiendo (las últimas reformas laborales dan miedo) y cómo la crisis va mellando los ánimos de mis amigos y si les digo: hoy estoy estresada porque trabajé mucho, me preguntan mil cosas como cuánto gano, cuantos niños hay en mi aula y cuanta gente trabaja conmigo. Y pierdo la batalla de protestar, porque siempre hay un amigo que está peor en España. (Los hay incluso sin trabajo alguno, fíjate si tendré pocas razones para quejarme) Pero es que, no hay nada más doloroso que sentir que tu país se va a pique económicamente, y que con tanto recorte no va a quedar nada que llevarse a la boca. Hace algunas entradas, defendía el optimismo, pero esta crisis está mellando mi propia esperanza de regresar a Madrid algún día (si es que realmente quiero regresar que no lo tengo nada claro, para ser sincera...) y mis ganas de hablar con mis amigos españoles. Porque siento siempre cierto aura de pesimismo, y la brecha que nos separa- sobretodo la que nos separa en cuanto a situación económica y posibilidades laborales.- Es como sentir que una parte de tí se separa lentamente, se aleja, y no sabes si quieres recuperarla realmente o dejarla irse... Posiblemente nunca se irá. La última vez que fui a Madrid, me sentí bien por un lado. Por otro, desconectada, lejana. Deseando pertenecer más que nunca a mi país, y queriendo seguir la vida allí. Por otro lado, mi corazón tiraba hacia Dublín y todas las novedades, y experiencias. Y no pude evitar sentirme entre dos mundos. Queriendo vivir en ambos al mismo tiempo. No es que no quiera vivir en Madrid. Es que mi vida en Dublín me gusta más. No es que no quiera vivir en Dublín, es que a veces echo de menos Madrid y la vida madrileña. No es que quiera volver. Es que me da pena reconocer que realmente me he ido. No es que quiera quedarme, es que no puedo irme. Y tampoco es que no pueda irme, es que también quiero quedarme. Mar de contradicciones, lo sé. El día que lo entienda, quizá sea posible de explicar un poco mejor. Happy days!

domingo, 29 de abril de 2012

Froda me mira con curiosidad. Soy la única que no habla con él con acento irlandés. Somos ambos de fuera, él es sueco y yo española. También soy la única que espera a que él se acerque, sin darle órdenes (porque tampoco es mi trabajo, él está en el aula de al lado) y que le dice "hi how are you" con una sonrisa en los ojos. Lynda no tiene demasiada paciencia con los niños un poco lentos, y yo creo que Froda no es lento, simplemente no entiende muchas cosas (apenas lleva 4 meses en Dublín, sus padres, ambos suecos se mudaron hace poco a la ciudad). Un día salgo al patio a apoyar el aula de 2-3 años y me pongo a jugar con ellos. Froda me mira en silencio y me pasa una raqueta de plástico para que les tire las pelotas al aire (qué le voy a hacer les gusta recoger las pelotas, parece un juego para perros, pero se divierten). Se me ocurre una innovación, lanzo tres pelotas al aire. Los niños estallan en risas, y puede que sea la primera vez que oigo al niño sueco reírse a carcajada limpia. No sé si lo sabe, pero me identifico a veces con él, porque parece tan solo en medio de gente de otro país...tan perdido. Como yo cuando llegué a Dublín por primera vez y me hablaban deprisa. Un galimatías. Espero que aprenda muchas cosas. Me mudo de Escuela infantil, al aula montessori. AULA MONTESSORI, hurray!!!. Estoy contenta, pero sé que voy a echar de menos a los niños de mi aula (aunque no hablen y sólo sepan emitir sonidos guturales y llorar de vez en cuando). Siento que mi energía se mueve en la dirección adecuada. O eso espero. Mañana empiezo y habrá tantas cosas que aprender y que contar, que tengo que descansar muy bien. Sigo siendo una extranjera, con un nivel un poco mejor de inglés, y siempre tengo que duplicar el esfuerzo más que cualquier nativo, lo sé.

viernes, 13 de abril de 2012

¿?

Madrid...Mañana nos vemos. No puedo evitar esos nervios pre-viaje, y esa sensación de extrañeza que siempre me entra cuando vuelo a casa. Home.

Mis compañeras de trabajo me preguntaron Are you going Home?
Y es cuando noté ese sentido de casa, propiamente dicho, no casa como espacio de cuatro paredes, sino la tierra donde nací.

Cada cierto tiempo recargo pilas en Madrid, y me acuerdo de que soy española, de cuál es mi verdadera naturaleza. Una chorrada, lo sé, pero es algo que sólo siente el que vive en otro país. Desde que sentí que mi permanencia aquí es más duradera, hay días en los que me pregunto si es la decisión correcta o no.

No hay bien o mal que dure cien años dicen. Y quizá mi miedo más profundo no es el de tener que quedarme a vivir en Dublín. Es el de tener que volver. Mal asunto, mi mundo está dado la vuelta, literalmente, y ya no sé cuál es realmente mi hogar. My home.

Probablemente Madrid, aunque Dublín está últimamente ganando puntos para ser considerado también un hogar. Y España perdiendo puntos para ser considerado un hogar (la crisis, quizá sea lo que me haga sentir miedo de volver)

Para qué engañarnos, donde una puede desarrollarse emocionalmente y económicamente (la independencia es importante) también se puede considerar hogar. Porque facilita el crecimiento.

Ahora...sigo sintiendo que la familiaridad de Madrid me hace sentir mi propia forma de ser.
No espero ser comprendida, es algo que hay que vivir. Lo siento.

sábado, 24 de marzo de 2012

Realismo total

Mi primer mes en el trabajo tiene sus luces y sombras. Como siempre trato de hacer, veo las luces, pero a veces las sombras me alcanzan, y tengo que criticar para desquitarme un poco. Es lo que tiene ser una soñadora nata, sin remedio, quizá.

Lo mismo cuando tenga 40 años me daré cuenta de que esos sueños sobre la educación ya no me posseen con tanta fuerza y que sé que lo que hay es lo que hay, y punto pelota. (Matiz tiránico de la realidad...aunque para ser sincera, sé que la realidad nunca fue tiránica, fue más bien real, sin emociones ni nada...)

¿por qué esta introducción tan etérea para un tópico como la educación? Ni idea, es mi estilo, qué le vamos a hacer.

Al grano pues: lo que sucede es que estoy trabajando en aula de bebés, y el ritmo de trabajo es muy estresante. Tanto que mis compañeras de trabajo apenas les dedican tiempo humano a los niños, porque las rutinas del aula arrastran literalmente a los niños.
Por ejemplo, yo empecé con uno de los niños a enseñarle a comer con la cuchara porque ya está en esa fase en la que puede hacerlo. Es algo que la educación contempla (en el mundo ideal, creo yo, ese que nunca existió, sólo en los libros) y mis compañeras le quitaron la cuchara de las manos al niño no por maldad, sino por realismo, porque no hay tiempo y luego hay que limpiar, lo cual quita tiempo para hacer otras cosas.
Ejemplo número dos: cada vez que un niño no viene donde queremos, o se le arrastra, o se le levanta en brazos, (con lo cual nos rompemos la espalda por motivos que no tendríamos porqué) y con ello se limita su capacidad de reacción. Hurray!!
No se les da tiempo para reaccionar.
No me quiero poner negativa, pero creo que estoy pasando por una crisis idealista...como siempre las ideas más fuertes sobrevivirán y las que no se ajusten a la realidad moriran. Ley de la jungla.

Y tod como he dicho anteriormente, no es por culpa de nadie o por mala leche, sino porque la semana que viene entran dos bebés nuevos y vamos literalmente a tener demasiado estress como para detenernos mucho.

Ahora bien, aplaudo el hecho de que las ratios en Irlanda son decentes, porque no quiero ni imaginar cómo sería este mismo trabajo en España, con 8 bebés por cabeza (alguna educadora infantil habrá pensado en comprarse una cabeza nueva para sobrevivir).
Lo sé, debería haber hecho un master de esos para pijos y estaría ahora mismo mirando a la gente por encima del hombro y diciéndole a la gente lo que tiene que hacer.

domingo, 18 de marzo de 2012

Generación JASP

Leed y deprimiros.

A veces me pregunto porqué cada vez que pienso en España me entra pena...he aquí el porqué...

http://www.youtube.com/watch?v=Pt6zxMK6JFI&feature=fvst

España se sitúa entre los países con mayor paro juvenil anterior a los 35 años.

y...muchos de ellos están dispuestos a emigrar por ese motivo. Ah, también menciona la sobretitulación (el hecho de trabajar en un puesto de trabajo inferior a nuestras cualificaciones.)

Me siento perfectamente identificada con el problema.

PERO...

Reformulación positiva: Si no fuera por la crisis, probablemente no estaríamos aprendiendo tanto los que emigramos. Todo problema tiene una solución y ofrece una habilidad para aprender. Adaptación al medio.

Estar sobretitulados no es un problema, porque siempre responderemos a nuestro trabajo mejor de lo esperado. Superamos los estándares.

La crisis pasará y nos reíremos de todos estos problemas. O eso es lo que sueño. Soñar es gratis, ¿no?

jueves, 15 de marzo de 2012

Breves apuntes...

Parece ser que sí...que tengo un trabajo estable. No voy a cantar victoria porque es demasiado pronto (apenas llevo un mes en este sitio, no quiero anticiparme).

Y me asusté el otro día cuando mi coordinadora me dijo: Tienes que elegir tus vacaciones.
Tus vacaciones. Your holidays. Winter holidays!!!!

Come on!!!! Increiblemente rápido, no me fío demasiado de que esto sea real.

Ahora, después de años de inestabilidad laboral, me pregunto si sobreviviré a la mera idea de tener un trabajo permanente. Si paso los tres meses de prueba, estoy condenada a la comodidad de vivir en Dublín, en una casa con jardín, cabaña para mi bicicleta, una biblioteca y un centro comercial al lado y buses que llevan al centro (plus carril bici).
¿sobreviviré? ¿podrá conmigo la tendencia a rodar como una pelusa? ¿aguantaré la ausencia de sol sin incrementar mi ingesta de alcohol? (St Patricks se avecina...qué peligro!)

Nunca se sabe. Por cierto, siento pena de que para encontrar una vida un poco digna haya tenido que salir de mi propio país. Y pena de que cada vez me va a costar más volver, si las cosas salen bien.

Emigrar tiene mucho peligro. Si estás pensándotelo, ponte fecha de vuelta, no hagas como yo que no lo hice.
De hecho mi primer pensamiento al montarme en el avión fue: "Sara, ¿tú no serás como esa gente que le coge vicio a viajar y ya no es capaz de vivir en su propio país?"

De ello hacen al menos 3 años. Y sigo aquí. Sin comentarios.

viernes, 2 de marzo de 2012

Extraña manera de empezar marzo...

Marzo empieza soleado. Y con trabajo. De ayudante de educadora infantil en el aula de bebés. Nada de español, todo en inglés.

Menudo desafío...después de dos años aquí todavía me pongo nerviosa cuando tengo que hablar con un padre o madre. Primero, porque son padres y estoy cuidando de sus criaturitas. Segundo porque no soy de aquí, y me da respeto cometer errores de pronunciación y que piensen (mira, esta no es de aquí...¿aprenderán a hablar mis hijos bien con gente como ella?)

Ahora, no parece que haya problemas de comunicación. Lo divertido es que todos mis problemas de comunicación son con mi compañera de trabajo búlgara, que tiene un acento a lo apu (el de los simpson) que no hay cristo que la entienda!! No comments.

Nuevos desafios en el futuro: No olvidarse de un mísero detalle. Los bebés son extremadamente delicados, y les pasa de todo durante el día, así que hay que informar bien de lo sucedido (included nap times...)
El otro, el más difícil, es repetir cada palabra a Zhidvka, porque no me entiende. Puedo decirle lo mismo a mis compañeras que al segundo me responden. Ella, se toma su tiempo.

Paciencia, Sara paciencia (mi ego me dice: no te preocupes, no es tu inglés, es SU inglés...) Mi lado tolerante me dice: bueno, tampoco es que siempre te entienda todo el mundo, no?

Pues eso, buenas experiencias como siempre. Sobretodo me doy cuenta de con qué facilidad mis compañeras han etiquetado a los bebés y ya cada uno tiene su papel. Eso es universal. Pero no pasa nada, aquí estoy yo para evitarlo, que para eso hablo menos y observo más.
O eso es lo que creo. Claro que cometo errores también. (A miles...teniendo en cuenta que empecé hace dos semanas.)
Quién me iba a decir que acabaría yo en una escuela infantil de Dublín.

Tengo pendiente una entrada en honor a mi amigo húngaro Tomas, que lleva días reflexionando sobre dos palabras concepto (extraño, teniendo en cuenta que es un tema más viejo que el continente europeo como tal): Happiness and joy.

Felicidad y diversión. Por su culpa llevo una semana pensando en dicho tema, y aún no he podido darle forma, sin recurrir a viejas lecturas de la universidad. Espero encontrar una nueva respuesta, no quiero ser repetitiva.

That,s all folks, see you another time!

domingo, 19 de febrero de 2012

Energía como soplo de vida
Cariño como fuente de energía natural
que mueve
y nos mueve a ser comovidos

Y cuando menos lo esperas
ahí hay una persona
que siente lo mismo

O parecido, no te engañes.

Fusionarse
Separarse
Hacerse preguntas

Somos esferas incompletas
bañadas por la luz del sol
unidas por la fuerza del amor

martes, 14 de febrero de 2012

Perdón...no soy irish, ¿me tiño el pelo?

Perdí el trabajo por ambiciosa. Me quise cambiar a otra escuela sin dar tiempo a mi jefa (para qué nos vamos a engañar, nos tenía explotadas a todas y nos pagaba lo que le daba la gana en realidad...el maravilloso mundo de los profesores nativos que no tienen ni idea de la legislación del país) y dió una mala referencia de mí.

Resultado: El desempleo total (sin derecho a paro hasta que no haya cotizado en Irlanda al menos 36 días). La escuela infantil que me había asegurado el trabajo, me llamó para decirme que ya no fuera a trabajar. De shock.

Pero no escribo para llorar, ya me tomé mi tiempo para ello, sino para hablar de la atmósfera social que se respira por Irlanda últimamente (o la que yo respiro)
Desde que estoy desempleada tengo más contacto con gente desempleada - al menos en mi casa somos cuatro personas sin trabajo- y lo que más llama la atención es que a tres de nosotras nos pagaron una basura o nos timaron con las cuentas.

La semana pasada estuve haciendo llamadas para demostrar que mi inglés no es de principiantes y saber si tenía posibilidades en algunas escuelas, y una de las preguntas recibidas fue ¿qué título tienes? ¿es irlandés?
Y me pidieron que lo tradujera oficialmente, y que ya hablaríamos de entrevista de trabajo después. Tal cual. Hasta ahora en Dublín nunca se preguntaba por la traducción de títulos, sino por su equivalencia con los del país.
Recibí una llamada de teléfono para una entrevista de trabajo (no todo van a ser amarguras) y el manager de la escuela me dijo: " La verdad es que me gustaría contratar a una chica irlandesa, pero habrán emigrado todas, no sé".
Lectura: Mira, sé que eres española, prefiero a los de mi país, pero bueno, a unas malas, me queda tu curriculum, que parece interesante. A pesar de ser española.
So...what?
Dadas las circunstancias, acepté porque era mi única entrevista- por el momento- y no se puede decir que no a casi nada hoy en día, aunque sea a picar piedras...

No soy la única que ha recibido un comentario racista acerca del origen o nacionalidad (a mis compañeras de casa les dijeron que conocían a otros húngaros y que solían ser vagos, no comments!)

Personalmente, me siento decepcionada de que en Irlanda se sigan los mismos procedimientos que en otros sitios. Eso demuestra que somos todos iguales y ante la crisis en vez de abrir puertas, las cerramos.
qué triste, ¿verdad?

lunes, 23 de enero de 2012

Diferencias culturales notables 2.

El sentido de las cosas. Los comportamientos socialmente aceptados.

Una anécdota curiosa como ejemplo: Tengo una amiga irlandesa cuyos padres viven en Hungría (él es diplomático), y una semana antes de navidad se fue a visitar a sus padres con su hijo de 6 años.

Estaban visitando el zoo allí, y su hijo que se porta bien por lo general (ella es enfermera veterinaria, jamás toleraría que nadie tratara de dañar a un animal) un poco más emocionado le dijo a su madre: "¡Mira mamá, un tigre!"

Una señora que estaba a su lado empezó a regañarle, como si hubiera cometido la peor de las faltas, cuando realmente sólo había levantado la voz un poco.
Mi amiga Maeve se puso entre la señora y su hijo para evitarle el susto, ya que ella ni hablaba inglés, ni estaba siendo precisamente amable.

Cuando le conté esto a mi compañero de piso que es húngaro, asintió con la cabeza como si fuera normal comportarse como la señora. Al menos en su país.
Le pregunté porqué, y ésta fue su respuesta:

Al zoo, en mi país no se va a divertirse, sino a aprender. De modo que el comportamiento socialmente aceptado es estar en silencio observando y asimilando información, no pasándolo bien, o haciendo fiestas porque te gusta un animal u otro.

¿Qué?

¿Que aprender es más importante que pasárselo bien?

Me pregunto que piensan en Hungría acerca de las nuevas pedagogías y el aprendizaje a través del juego. ¿será algo socialmente aceptado? ¿habrá que estar callados para aprender siempre?

También cabe otra posibilidad, que la señora estuviera amargada y no tuviera otra cosa que hacer.
En cualquier caso, me parece interesante el hecho de que una cultura priorice el silencio sobre el ruido en entornos didácticos (museums, zoos), mientras que en otras el ruido es algo socialmente aceptado e incluso mejor que el silencio.

Digo yo...que me puedo equivocar, vamos.

martes, 17 de enero de 2012

Diferencias culturales notables 1.

Desde que mi vida es bastante estable, le doy vueltas a la cabeza, para encontrar un modo de sobrevivir al duro invierno irlandés. No tan duro este año, tengo que decir, porque el pasado la nieve lleno las aceras, y en unos días se convirtió en un caos tal que era imposible conducir bicicletas, coches o incluso caminar.

Este año, a pesar del cambio de horario radical (para quien no lo sepa, en Irlanda en invierno anochece a las 4,30 de la tarde, lo cual hace la vida un tanto deprimente sin la presencia de cafeina o incluso alcohol- para espabilarse), se puede vivir medianamente bien.

Como iba diciendo, en mi cavilar y charlar con mis compañeros de casa (húngaros en su mayoría, no me preguntéis porqué) llegué a encontrar ciertas diferencias emocionales entre la cultura española y la irlandesa. Es algo de lo que no me había dado cuenta en Madrid.

Las emociones se expresan de forma diferente en cada país. Pero también, cosa curiosa, se manifiestan de forma diferente.
Aquí, el tiempo influye yo creo, de forma que nos encontramos con que la gente es "no infeliz". Me explico. Se trata de no tener penas, de no pasarlo mal, pero hay cierta atmósfera de no infelicidad, pero las emociones intensas, o el registro emocional de "super-felicidad" a "infelicidad absoluta" es poco variado. Se está normal (Ok) o con ciertos problemas, pero no se tocan los extremos (a no ser que pasen cosas terribles, of course!)

Yo creo, y es una idea loca, loca, que en España nuestro registro emocional suele ser más variado, y más próximo a los extremos (parece que tenemos que estar hiper-felices o pasar a la infelicidad, como que el drama es algo presente...)
De hecho, yo echaba de menos más que nada, el hecho de poder dramatizar, y ahora estoy casi acostumbrada a la "planitud" emocional.
¿es el sol un elemento influyente? Puede...o no?
Porque cuando vine, me deprimía la ausencia de sol, pero últimamente, me parece tan normal, que lo único que siento es cierto relax (siempre y cuando no anuncien lluvias y se trate de nubes blancas) Tal vez se haya filtrado dentro de la cultura irlandesa cierta ausencia de emociones fuertes, y las busquen en los estimulantes (de ahí que se diga que es un país de alcohólicos, muchas veces sin motivos). Quiero decir...quizá la cultura se ha adaptado a la falta de estaciones, y nacer en un país sin sol, haga que dentro no se tenga esa intensidad, sino otra variedad distinta de emociones.

Quizá me equivoque, ojalá alguien hubiera investigado sobre estos menesteres, tan interesantes...
Hay tantas pequeñeces por conocer.
By the way, un libro que recomendaría leer por aquí es...Through the languaje glass, how words colour your world. El autor es Sthepen Fry. (Traducido al spanish...Esteban Freír.) Debe haber alguna traducción disponible, supongo.

Muy jugoso...Precisamente habla de cultura, y de las teorías lingüísticas sobre cómo se ve el color en distintas culturas, porqué existen diferentes nombres para los colores, o porqué incluso, cosa que me ha dejado asombrada en otras culturas no le ponen nombre al azul, y lo nombran igual que otros colores, como el negro.

O porqué Homero decía que las ovejas en la Odisea eran de color púrpura.

Otro día más...Aún estoy madurando mis ideas.