Urbanismo Protesta

  • http://bicicritica.ourproject.org/web/
  • http://quierescallarte.ourproject.org/

viernes, 1 de febrero de 2008

Mamá tercer sector

Voy a hablar del tercer sector o también según autores, "tejido asociativo".

Cuando hablaba en otro post sobre las relaciones entre el estado y el mercado, al final añadía las funciones de "mamá tercer sector", que se referían a la importancia de la participación social de las personas en su comunidad, entendiendo como comunidad, el entorno donde te mueves, los vecinos que tienes, la red de relaciones existentes entre las personas, al margen de lo que pueda proporcionar el estado en su sistema de bienestar social.
El "tejido social" en las grandes ciudades anda un poco agujereado, por circunstancias como el individualismo: cada vez dedicamos más tiempo a nuestra propia burbuja personal y descuidamos lo que nos rodea, somos personas que hemos reducido nuestra vida a los amigos, la pareja y poco más, lo que nos divierte y entretiene.
El mismo hecho de que nadie sepa qué quiere decir el sector social y lo confunda con el estado de bienestar, da mucho que pensar.
Este tejido asociativo, supone movimiento para cambiar las cosas, movimiento para pedir lo que se necesita en un barrio o en unas circunstancias determinadas (las asociaciones de barrio, algunas ya un poco en vías de extinción y otras no tanto son un ejemplo, así como las asociaciones culturales en las que se hacen cosas para modificar el entorno de barrio, o bien a mayor escala.)

Cuando existe un buen "tejido asociativo" existe mayor posibilidad de que la gente haga cosas y se conozca, se elimina parte de la soledad que tienen las personas mayores, así como las personas más jóvenes pueden aportar sus ideas a la sociedad. Refuerza entonces los lazos de "pertenencia" al lugar donde vives.
Ahora bien, ¿Qué es pertenecer? ¿Qué entiendo yo por pertenecer? El diccionario de la RAE, dice lo siguiente: " Referirse o hacer relación una cosa a otra o ser parte integrante de ella".

Perteneces al lugar del que te sientes parte, en el que participas y te relacionas con ese entorno. Pero actualmente cuesta decir que se pertenece a algún lugar, en primer lugar, porque nos movemos más que nunca de residencia (sobre todo cuanto comienzas tu independencia de piso en piso compartido, si has elegido esta forma de independizarte, si es que existen otras viables y que no te hagan estar más de 20 años en casa de tus padres) y en segundo lugar porque las vías de participación y asociación requieren de tiempo.

Y la vida individual se llena de actividades de todo tipo, tal vez no tan comprometidas, no podemos quejarnos, estar ociosos a cierta edad es prácticamente imposible, o estás buscando tu lugar de residencia, o estás buscando trabajo, o bien te estás formando para ser más competente aún para ese mercado al que tienes que llegar para poder pagarte un lugar donde vivir, y tener una vida medianamente normal.
Después llenamos nuestro tiempo con otras cosas, la televisión, los libros etc. Aún así, podríamos dedicar algo a nuestro entorno. Pero por las razones que sean, no lo hacemos.
¿Quiere decir eso que no pertenecemos a nuestra ciudad?

No lo creo. Simplemente significa que somos parte integrante pero que sólo nos integramos en el proceso económico de la ciudad, nuestra meta se ha reducido a tener una vida digna, una casa, una familia y poco más. Conservamos metas antiguas, con nuevas circunstancias que tal vez requerirían más movimiento social, más unión.
Aunque sea unirse para pedalear juntos y pedir un carril bici, hablamos de algo bueno, de algo que nos hace sentir parte integrante de un grupo, más allá de nuestras propias agrupaciones de amigos, o familia.
Cuando hablo de pertenencia no me refiero a sentirse "madrileño", "andaluz", "valenciano" o de donde sea, hablo de sentir que compartes algo con las personas que te rodean, algo que te une, aunque sea la experiencia.

Aunque Madrid sea una capital, en absoluto creo que la gente se sienta así, yo diría que más bien es una ciudad donde vivimos porque hemos nacido en ella, y no sabemos vivir sin este ritmo acelerado que nos "impone" a veces. ¿yo qué soy? Si acaso madrileña, nacida aquí, pero hasta que no agarré mi bicicleta y me paré a mirar las calles, no me dí cuenta de que me gusta esta ciudad, un poco al menos, de que tiene una historia y unas zonas que son bonitas, que merece la pena visitar. No soy gata, porque mi madre es segoviana y mi padre ha vivido en el norte mucho tiempo, pero si que tengo en las venas ese ritmo infernal, he crecido con él, de ahí que pueda seguir en esta ciudad.

Pero si me preguntan ¿perteneces a Madrid? No lo sé muy bien. A veces me parece que sí, y otras veces me parece que no, que es una ciudad un tanto fría y no por el clima. Y puedo afirmar sin lugar a dudas que los lugares que me hacen sentir parte han sido las asociaciones y la institución en la que estoy estudiando actualmente. Al menos con ambas cosas he compartido mis experiencias y mi tiempo. Y algo más importante: valores.
Esta es la segunda cosa más importante (o tal vez la primera para pertenecer a un lugar) compartir valores, como el aprendizaje común, el ánimo de dialogar o las ganas de juntarse para hacer algo, como ir de acampada (en los scout por ejemplo) y aunque no sea muy transcendental, mirar las estrellas por la noche y decir: "mira, Orión"... podría poner mil ejemplos.

A mí el estado no me hace sentir que pertenezco a un lugar y si no, probad a pisar una administración pública, casi dan ganas de salir corriendo, pertenecer no es la palabra más adecuada. En eso se diferencia del tejido asociativo, en que no ofrece experiencias enriquecedoras. Bueno, habrá quien encuentre divertido lo de ir de ventanilla en ventanilla. En tal caso hay unos señores y señoritas de bata blanca muy amables, llamados psicólogos que le vendrían estupendamente.

Salud y pertenencia

5 comentarios:

Aristófanes dijo...

Bueno, el análisis de la situación actual que haces es bastante acertado; no he visto de cerca las ciudades grandes de España, pero las medianas y pequeñas están bastante-muy individualizadas. El fallo que encuentro es que no termino de tener clara la relación entre individualización y ese sentimiento de "pertenencia".

A fin de cuentas, una de las sociedades más individualistas es a la vez una de las más patrióticas. Y para ser patriota es necesario tener un sentimiento de pertenencia bastante fuerte.

Más preguntas: ¿qué tal llevas la distinción entre ámbito público y ámbito privado? ¿Has oido hablar de la libertad de los antiguos y la de los modernos? Entiendo lo que dices; cuando empiezas a sentirte parte de algo te das cuenta de cuántas cosas mejoraríancon un mínimo esfuerzo. El potencial de una ciudad como Madrid es brutal, nadie puede negarlo...y sin embargo no hay nada.

El problema es...¿hay alguna forma de conseguir un tejido social fuerte sin perder ni una sola de las ventajas del individualismo? Porque eso es como los derechos humanos: hace unos años a nadie se le ocurría pensar en ellos; hoy nadie está dispuesto a permitir que no se los reconozcan (cumplirlos o no es otro tema).

Sarilla Malibú dijo...

Vale, vayamos por partes, dijo el cirujano:

¿Crees que patriotismo es igual que pertenencia? ¿Qué es patriotismo? ¿qué es pertenencia para tí? ¿Crees que el individualismo tiene cosas buenas? ¿Cuáles? ¿Y malas? ¿Cuáles?
Probablemente es que estoy hablando de una noción de individualismo con connotaciones negativas (la soledad de los ancianos etc...)

Ah y sobre el potencial de Madrid... ¿qué potencial? Es una gran ciudad, no lo sobreestimes, hay mucha gente, y por eso siempre se habla más de Madrid, porque además aquí se ha centrado todo. Pero de ahí a que seamos más patrióticos o no...

Otra cosa, sobre el tema de la libertad mejor q me digas q clasificación estas siguiendo, y te entenderé mejor, vamos ,que seas un poco más concreto, y me digas dónde te sitúas y con respecto a qué pregunta.

La libertad es otro temazo, que siempre me ha dejado fascinada, desde luego, tiene mucha miga.
Pero tampoco encuentro la relación entre la pertenencia y la libertad. A no ser que quieras decir que la comunidad resta libertad al individuo, que a mi juicio no es así. La comunidad debería ser la potencia del individuo, más bien.Y en algunos casos lo es, porque donde no llegas tú, llegan tus amigos, o te echan una mano. Eso también es comunidad o tejido social. El hecho de que haya aspectos negativos no signfica que todo sea negativo.

No creo, como ya te dije en otro post en los extremos, porque siempre pecan de reduccionistas, ese es el problema, parecen más convincentes a nivel lógico, porque se autojustifican, pero no me parece que constituyan una respuesta verdadera a la realidad que suele ser diversa.
Ah, el extremo lo veo en contraponer el individualismo a la noción de comunidad. Como si cuando tú estuvieras con gente dejaras de ser tú mismo.
Lo público y lo privado... requiere de otra respuesta larga, sin duda. Lo dejo para cuando la inspiración me llegue, y le dé suficientes vueltas en la cabeza.

Saludos y gracias por plantear más preguntas

Aristófanes dijo...

Vaya, yo creía que lo de las partes lo dijo Jack el destripador....A ver si puedo intentar contestar un poco...

El patriotismo es el sentimiento de identidad nacional, eso que en España no existe (si alguien tiene dudas que avise y lo explico otro día); básicamente es eso que estás llamando sentimiento de pertenencia pero a un nivel un poco más amplio, al nivel del estado. Evidentemente, nadie pertenece a un estado. Cuando una persona se va de su país lo que echa en falta son sus amigos, su casa, su barrio como mucho. Decir que se echa de menos un país es algo tan abstracto como decir que se echa de menos el número 4.726. ¿Quiere eso decir que nadie pertenece a nada? No, lo que yo diría es que los que son realmente patriotas -no los patriotas de hojalata ni los de banderitas en la casa- son aquellos que tú dirías que forman parte de un tejido social sano...o algo así creo haber entendido. Vamos, gente a la que le importa su modo de vida dentro de una sociedad y quiere mejorarlo en la medida de lo posible.

Y ahí pertenencia lo estoy usando en un sentido bastante pobre: formar parte de. Se puede pertenecer a una ciudad sin hacer nada por ella o desviviéndose por mejorarla. Aunque creo que ahí sería más claro hablar de co-existir con la ciudad y pertenecer, igual he sido confundente, culpa mía.

El individualismo tiene muchísimas cosas buenas. Fue el movimiento que consiguió terminar con el antiguo régimen e instaurar el estado de derecho -que, por mal que funcione, es lo mejor que hemos conocido hasta ahora. Es cierto que hoy en día se suele poner más peso en esas connotaciones negativas que dices, pero eso es mirar sólo el lado más radical del individualismo. El lado sensato es el que busca que cada cual sea libre de vivir como quiera, sin que nadie le imponga un modelo de familia, por ejemplo.

Lo del potencial...¿alguna vez has oído hablar de los domingos sociales? Básicamente, se trata de que la gente se junta y trabaja por arreglar los jardines, los paseos, lo que se podría llamar zonas de uso común. ¿Cuánto trabajo de ese tipo podría hacer Madrid si consiguiera que tres cuartas de su población colaborara? A ese potencial me refiero; comparado con eso, un pueblo de veinte mil personas en el que todas trabajen se queda prácticamente en nada. Lo que falta es la parte de que ese potencial pase a ser acto y no se quede sólo en potencia.

Te acepto lo de la libertad, pero eso te lo contestaré en mi página, que me llevará bastante tiempo. Pero las relaciones entre pertenencia y libertad son muchas. Primero, si no eres realmente libre de elegir si entras o no, no creo que se pueda decir que perteneces a nada. La pertenencia ha de ser decisión libre. Que la comunidad reste o no reste libertad al individuo depende de muchas cosas; normalmente las comunidades tienden a convertirse en grupos cerrados con unas normas sociales muy estrictas y ahí sí que coaccionan la libertad individual. Pero contaré más de eso cuando explique lo de la libertad, que es bastante confuso dicho así. La idea que tengo en mente para desarrollar es que individualismo y comunitarismo (decir socialismo sonaría muy raro) se necesitan mutuamente. Si se entienden como excluyentes es cuando sólo se ven los lados malos de cada uno y se termina en un caos.

Bueno, los extremos son muy útiles precisamente por ser reduccionistas: un análisis totalmente radical de la realidad te permite ver las consecuencias últimas -negativas- de cada movimiento; así sabes cómo tienen que complementarse. Por ejemplo, un comunitarismo extremo sí elimina la libertad del individuo. Así que el comunitarismo real hay que complementarlo con algunas medidas individualistas destinadas a proteger la libertad individual. Y mirándolo por el otro lado pasaría lo mismo, claro...

En fin, dejamos dos cuestiones pendientes, la libertad y lo público y lo privado (que también lo veo bastante relacionado...empiezo a pensar que veo relaciones y libertates por todas partes).

Saludos y gracias a ti por meterte en estos berenjenales...espero que te sirva para algo!

Anónimo dijo...

tienes razon cuando dices que escribir no es facil porqe yo tambien lo siento,depende muxo del momento, el lugar, el espacio, tu animo, aveces escribo algo q no es nada y algunas personas dicen que es interesante y para mi no es nada, bueno almenos eso siento. chau

Sarilla Malibú dijo...

Bienvenido anónimo.
La verdad es que escribir es más que un impulso, también hay que querer decir algo.
Es otro tema, sobretodo en los blogs, si se escribe para que nos contesten o para comunicar algo.

¿tienes blog? (por curiosear, vaya)