Que no se apague la luz de los sueños,
que no se duerma la luz de mis días.
Que no te borren de mí,
aunque sea tras la tormenta,
Que jamás olvide tu huella sonora,
los pasos ignorados de la bondad humana,
la sonrisa acogedora de tus labios,
o la huella que deja,
tu voz en mis oidos.
caminante no hay camino
Que no te olvide jamás,
aunque bien sé,
que jamás exististe
(del todo)
se hace camino al andar
Que no pueda olvidar que siempre
soy, y he sido,
digna de vivir y ser
un proyecto de vida.
qué no digan jamás,
que no te supiste dar.
Por los que dan muchísimo a los demás y hacen el bien porque les sale del pie izquierdo. Gracias por existir. Sin vosotr@s el mundo sería un poco más gris y feo.
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2 comentarios:
Que no te olvide jamás,
aunque bien sé,
que jamás exististe
(del todo)
o.o Snif
Esa estrofa sí que me llegó. Tal vez le vi un significado demasiado especial para mi que no tiene nada que ver con su contexto o tal vez quisiste expresar exactamente lo que yo he intentado en algunas poesías, pero me conmovió mucho.
No sé si coincide. Tal vez. Si quieres lo explico, aunque no sería propio de un poema, lo dejaré en una pregunta que siempre me hago, tras conocer gente y más gente...
¿Porqué tras la ausencia de la gente siempre me queda esa sensación de vacío, o inexistencia?
Coincida o no el sentimiento, que ni siquiera creo que se vea reflejado con la pregunta que he escrito, me alegro de que hayamos conectado a través de un poema.
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