El género del terror está de capa caída. Pongamos que se ha transformado en una serie de fórmulas repetidas, como los gags cómicos pero con recursos estúpidos como espíritus con cara de cadáveres, puertas que se abren solas y música horripilante que te indica que va a pasar algo malo. Aunque no haya una atmósfera adecuada para ello.
Voy a desrecomendar una película de "supuesto terror"; se llama "Llamada Perdida".
Criticar y despellejar películas es un placer, sobretodo cuando te has dignado en pagar una entrada... (entenderme, es una forma de evitar que más gente pague por esta soberana basura)
Empezamos por un comienzo hiperprevisible, en el que una chica recibe una llamada perdida antes de morir (plagio descarado de Screem o como leches se escriba), y está sentada junto a un estupendo estanque, junto con un gato que maulla lastimeramente, como si fuera traido del mismísimo infierno.
¿Adivináis lo que sucede? Una mano sale del estanque y se lleva a la chica. (Nadie lo espera, seguro). Y por si no fuera suficiente, la mano tira del gato y se ahoga. ¿Qué culpa tiene el pobre bicho? ¿Acaso el asesino es un psicópata que tiene alergia a los gatos?
Segunda incoherencia: Todas las víctimas reciben un mensaje antes de morir y las muertes siguen un patrón determinado. Hasta que, bruscamente, decide el guionista que se trata de un espíritu que ¡¡¡envía mensajes por el móvil!!! a sus víctimas.
Y ahí es cuando la fastidia del todo: caemos en la incoherencia de que, aunque al principio existiera un patrón, ahora al espíritu le da por llamar a cualquier móvil que esté cerca de sus víctimas... oooh que miedito. Lo que en un principio es de un modo, y podría ser obra de un psico-killer, se convierte en obra de un fantasma mu listo que adora las nuevas tecnologías.
Entre medias un exorcismo de una de las víctimas que no viene muy a cuento, y un policía atormentado que "tiene que proteger a la chica" que, no hace más que huir del fantasmita malo que se la quiere cargar... Que, no es por jorobar la peli, pero que sepáis que el poli muere de un navajazo en el ojo. Un superpolicía, supermachote, muerto de un machetazo, así como así de pronto. Si es que, los entrenan fatal hoy en día, te van a proteger y acaban muertos así, tontamente...
Y el fantasma mata, no por venganza o por nada en especial, sino porque...como murió junto a un móvil, no tiene otra cosa mejor que hacer que enviar mensajes a sus víctimas.
¿Qué más nos queda por ver? ¿El fantasma de la play station que se come a los niños/as? ¿ El fantasma del messenger que se reenvia en los archivos adjuntos? ¡Oh, no!, creo que me estoy asustando de veras.
Ya no tienen respeto por los espíritus tradicionales. Al menos en las películas de antes, las puertas al más allá estaban entreabiertas, había motivos para volver tras la muerte, y no era como en las pelis nuevas: un auténtico cachondeo. Ya no sabes si los espíritus se te van a colar en la videoconsola, en el portátil, el pc o, ya puestos en el microondas... (BUH, soy el fantasma del microondas, te voy a matar a base de Ondas alfaaaa o lanzándote la pizza hirviendo a la cara)
Antes, iban poco a poco, y tenían motivos para fastidiar, o habitaban en mansiones, casitas destartaladas o lugares donde la gente había sido asesinada. Eran gente atormentada por su pasado, no se mostraban como si nada, sino a la medianoche...
Ahora, vas por la calle y te encuentras uno ahi, a plena luz del día. No esperan a que llegue ese momento en el que se abren las puertas. Debe ser que se han cansado los de la aduana fantasmera de pedir los permisos y han dicho: vamos a abrir todo el día.
Ya no hay rituales: se te presentan hasta en la freidora, ahí como si nada. Deben de tener vuelos regulares más allá-más acá, en plan riyaner etc etc.
Lo único de veras bueno de esta película es que deben haberla hecho la brigada anti-móviles para convencer a la humanidad de que es un invento diabólico y peligroso.
¡Andad con cuidado! ¡El móvil es un invento nefasto!
Ups, me llaman.
(To be continued)
jueves, 20 de marzo de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario